
Cuando era muy pequeño, su padre le dijo a Daniel: «Hijo mío, anda siempre por la vida con los ojos bien abiertos». Desde entonces no los ha vuelto a cerrar.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado
This entry was posted on febrero 16, 2009 at 10:02 pm and is filed under Nombres propios. You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed.
You can leave a response, or trackback from your own site.
febrero 17, 2009 a las 8:58 am |
..ja,ja, cojonudo, pero como dijo A. De Saint Escupery:
No sé ve bien sino con el corazón, pues lo esencial es
invisible a los ojos.
febrero 17, 2009 a las 9:51 am |
Lo de «Escupery» es porque tiraba felipillos al hablar, ¿no?
febrero 18, 2009 a las 9:06 am |
….Exupéry,que crítico!!